Redacción Youtopía
Durante la administración del presidente de la República, Daniel Noboa, el objetivo es reducir el Índice de Desnutrición Crónica Infantil (DCI), en un punto adicional a la cifra vigente.
Así lo comentó la secretaria Técnica de Ecuador Crece Sin Desnutrición Infantil, María José Pinto. “La meta es reducir en un punto más la DCI. Es decir, pasar de 20,1% a 19,1% en nuestra administración”.
Otro de los objetivos durante esta gestión es incrementar el número de beneficiarios del Bono Infancia con Futuro, en al menos unas 6.000 u 8.000 personas.
De acuerdo con cifras de la Secretaría, el año pasado 81.372 personas obtuvieron el bono. Es decir, mujeres embarazadas, niñas y niños menores de 2 años, en pobreza o pobreza extrema.
Para lograr esas metas en 2024, la Secretaría cuenta con un presupuesto de USD 321 millones, cuya ejecución está a cargo de ministerios y secretarías ejecutoras de la Estrategia por la DCI.
La presencia en el territorio es una gestión primordial
Las denominadas Mesas Intersectoriales se constituyen en instancias fundamentales para avanzar en la aplicación de la Estrategia por la DCI en el territorio, señala María José Pinto.
“Tenemos nuevos territorios priorizados. La densidad poblacional tiene un peso más alto en esta priorización y esto también es porque queremos llegar a más niños”.
La parte más importante de la Estrategia –dice la Secretaria- se debe asentar en los territorios y ahí también es fundamental contar con el apoyo de las alianzas público-privadas.
“Si bien hay cosas que están hechas y el presupuesto está ahí, para fortalecer otras áreas en los territorios así como en la educomunicación se requiere ese tipo de alianzas”.
La Secretaria se refiere a la necesidad de contar con ese apoyo financiero, para afianzar la Estrategia enfocada en atender la multicausalidad que incide en la DCI.
Es decir, no se trata solo de un tema de nutrición, también se requiere atención y dotación de agua segura, servicios de alcantarillado, lactancia materna, atención médica, vacunación.
Recursos para proyectos enfocados en la multicausalidad
Como parte de la Estrategia Ecuador Crece sin DCI, en la administración de Guillermo Lasso se estableció un mecanismo de deducibilidad en el Impuesto a la Renta, para financiar proyectos.
A partir de ese incentivo, la Secretaría cuenta en carpeta con 10 proyectos y el fondeo que se necesita para esa ejecución son USD 23 millones. “En un mes de gestión hemos logrado seis millones”.
“Tenemos dos proyectos de agua segura (Santa Elena y Sierra Centro) que están financiados por el sector privado y están orientados a los territorios priorizados”, señala la Ministra.
El umbral de los USD 23 millones es referencial porque el propósito es incrementar el número de proyectos y la cantidad de interesados en apoyar esas iniciativas.
“Quiero dejar en claro que el fondeo de los proyectos no es al sector público. Es una fundación la que genera y ejecuta el proyecto, donde el sector público quiere y es fondeado por el sector privado”.
María José Pinto añade que para fortalecer el tema de la deducibilidad en DCI y esté más visibilizado se incorporará en el reglamento de la Ley de Eficiencia Económica.
La educomunicación y dos actores claves: educadores y doctores. Máximo, reaparecerá.
“Una de las conclusiones que hemos obtenido de la parte más técnica es que, quien más permea la información hacia la madre, la familia y el niño, es el doctor y la educadora”, dice Pinto.
Por lo tanto, la Ministra habla de fortalecer el trabajo educomunicacional en las Mesas y enfocadas en esos actores. Y con la participación de los ministerios de Salud e Inclusión Económica y Social.
Otra debilidad que reconoce la Secretaria es la dispersión en el enfoque de las campañas comunicacionales. “A manera de ejemplo, las acciones que impulsa el MIES sobre agua segura se hablan en enero, pero el Ministerio de Salud habla en febrero y nosotros (la Secretaría), en marzo”.
En consecuencia se están duplicando esfuerzos que no están llegando a la población. La idea es que se unifiquen las acciones y todos los actores hablen de un mismo tema en fechas específicas.
El personaje Máximo, que reapareció con la administración de Erwin Ronquillo en la Secretaría, para impulsar las acciones por la vacunación y la DCI, volverá a escena.
“El anterior gobierno invirtió muchísimo dinero para revivir a Máximo. Máximo nos ha funcionado, pero solo en temas de vacunación. Vamos a seguir trabajando con Máximo y por eso con Unicef llegamos a una suerte de ‘trabajemos juntos’”.
La Secretaria explica que, como Máximo era de Unicef y el Estado fue quien pagó para poder usar su imagen, se tenían muchas limitaciones en el contenido. Ahora eso se espera cambiar.
La ley de la Primera Infancia, en manos de la Asamblea
La Secretaria confía que la Asamblea Nacional incluya dentro de sus prioridades el debate de la denominada Ley de la Primera Infancia.
Ella destaca los aportes que se han hecho desde diferentes actores, incluida la sociedad civil, y enfatiza en la necesidad de que este sea un tema que convoque a todos los actores políticos.
“El Presidente (Noboa) ha dicho que la política de reducir la DCI debe ser una Política de Estado. Hay que institucionalizar a la primera infancia, para que no dependa de los gobiernos de turno”.
Hay que entender que en esta etapa es donde se produce el mayor desarrollo del cerebro de los niños. De ahí la importancia de los primeros 1.000 días de vida.
María José Pinto confía en el compromiso de todos los partidos políticos, para sacar adelante esta ley y se ubique como una de las prioridades de la agenda legislativa de este año.
Los proyectos de ley que se han elaborado al respecto han tenido muchas revisiones, dice la Secretaria, lo que refleja que se puede generar un producto legal sólido.
En cuanto a sugerencias que se pueden incorporar está la institucionalidad de la Encuesta ENDI y la deducibilidad, para financiar proyectos enfocados a la multicausalidad de la DCI.
¿Reglamento para reducir el desperdicio de alimentos dedicado a las empresas?
El 19 de enero del 2024, el Presidente de la República expidió el Reglamento a la Ley para Prevenir y Reducir la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos y Mitigar el Hambre de las Personas en Situación de Vulnerabilidad Alimentaria.
La normativa establece las condiciones en las que se deben encontrar los alimentos procesados para donación y sus respectivas medidas de seguridad.
Además, establece la entrega de un distintivo de reconocimiento denominado Actor Solidario, para las personas jurídicas y naturales que apliquen políticas de reducción, mitigación y donación.
¿Este reglamento solo beneficia a las empresas y qué sucede con el enfoque de nutrición y mitigación del hambre? María José Pinto menciona que se trata de otorgar un incentivo a las empresas que hacen las donaciones porque quienes van a trabajar por temas de nutrición son otros actores; y porque esta actividad, no está directamente relacionada con las empresas.
“Esta es una ley muy particular y muy específica. Las diferentes entidades que están enfocadas en nutrición estamos trabajando en eso; y también lo hacemos con organismos internacionales. Ese es un tema (buena nutrición) que lo debemos trabajar a través de educomunicación”.
María José Pinto y su experiencia profesional
La Secretaria Técnica ha trabajado de forma permanente con mujeres, niños y niñas de comunidades de la Sierra, en temas sociales y de impulso a la productividad.
Candidata a MBA por el Incae Business School. Cuenta con diplomados en programas de Mujeres en Gobierno Corporativo y Alta Dirección, y para propietarios de empresas.
Co-fundadora y miembro de Mujeres por Ecuador, organización privada sin fines de lucro que promueve una mayor inclusión de la mujer en roles de Alta Gerencia y Directorios.
También es miembro de Entreprenurship Organization, una entidad global con unos 14.000 emprendedores; además es parte del Directorio de la Asociación de Industriales Textiles del Ecuador (AITE), entre otras menciones.
