Redacción Youtopía
La sostenibilidad del agua también depende de la data. Por ello, el Distrito Metropolitano de Quito cuenta con 143 estaciones que monitorean este recurso y aportan 44,6 millones de datos al año.
Esas estaciones hidrometereológicas se distribuyen en: hidrológicas (33), pluviométricas (63) y climatológicas (47) y generan información cada cinco minutos (ver gráfico).
Así lo explica Mario Gualpa. Él es Coordinador de la Estación Científica Agua y Páramo (ECAP). Esta es una iniciativa promovida por el Fondo para la Protección del Agua de Quito (Fonag) y la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps).
ECAP se encarga de promover el desarrollo de proyectos de investigación que permitan comprender mejor los procesos y la dinámica del agua en el ecosistema del páramo.
En ese contexto, la zona hídrica de interés para Epmaps abarca una superficie de 155.100 hectáreas, que cubre los sistemas Papallacta, Mica-Quito Sur, Pita, Noroccidente y Atacazo.
Además, el 85% del agua que llega para los quiteños se genera en el ecosistema páramo.
La información que generan las 143 estaciones
Mario Guallpa asegura que si no se monitorea con frecuencia este recurso, difícilmente se puede administrar y gestionar el agua para el Distrito Metropolitano de Quito (DMQ).
Las 143 estaciones forman parte de la Red Hidrometeorológica Epmaps-Fonag, que están instaladas tanto en la parte urbana, como en donde se ubican las fuentes de agua.
Estos equipos operan 24/7 y la información que generan se enfoca en medir la cantidad de lluvia, la temperatura del aire, humedad del ambiente, radiación solar, velocidad del viento, entre otras variables.
A partir de esos datos, el objetivo es promover una mejor gestión del agua. En función de ese propósito, la data sirve de insumo para impulsar nuevos proyectos, elaborar mapas de lluvia, establecer modelos de pronósticos de tiempo (WRF), analizar tendencias de temperatura.
Eso ha permitido establecer las estacionalidades de la lluvia. Por ejemplo, en el DMQ llueve más entre marzo y mayo, y entre noviembre y diciembre; mientras tanto, en las fuentes de agua, ubicadas en su mayoría en la parte oriental de Napo, las lluvias son más frecuentes entre junio y julio.
Los desafíos frente al cambio climático
Promover una gestión integral del agua es el desafío permanente que se canaliza desde ECAP. Por una parte se pretende garantizar el suministro para la población, como un derecho humano y como un aporte al bienestar económico de la sociedad. Y por otra, minimizar el impacto en el ecosistema.
“Hay que llegar a un punto de equilibrio, para no abusar de esos servicios ecosistémicos en decremento del ecosistema. En ese concepto de sostenibilidad de agua, lo primero que se debe hacer es conocer cuánto de agua se dispone, y en función de eso poder administrar”, dice Guallpa.
Desde esa perspectiva y con la participación de la academia y otras entidades que aportan financiamiento se desarrollan proyectos, que permitan garantizar el suministro de agua.
Las investigaciones científicas que se llevan a cabo en la actualidad se refieren a la temperatura en el ecosistema del páramo y su impacto en la vegetación y en los suelos.
“Antes de hablar de los impactos del cambio climático, lo que se debe tener claro es analizar, monitorear y entender los procesos actuales del ecosistema“, señala el coordinador.
Jornadas del agua y la gestión integral
Del 20 al 22 de marzo de 2024 se desarrollaron en Quito las denominadas Jornadas del Agua 2024, con el fin de analizar las acciones integradoras que se aplican para la gestión del agua.
En el encuentro, Epmaps y Fonag destacaron el trabajo que realizan las entidad a favor de la protección y restauración de 20.000 hectáreas de cuencas hídricas que abastecen al DMQ.
Así lo resaltó la gerente general de Epmaps, Verónica Sánchez. Además, explicó que las tareas que se ejecutan tienen un enfoque técnico-ambiental, de equidad social y sostenibilidad, cuyo fin es recuperar los ecosistemas y garantizar la provisión de agua para el futuro.
El secretario técnico de Fonag, Bert de Bievre, durante su intervención en la jornada de conferencias en la PUCE, se centró en la necesidad de realizar investigaciones en estos ecosistemas, ubicados en el trópico frío y su relación con la disponibilidad de agua para la capital.
