Refrigeración y aire acondicionado, en la mira de la descarbonización
Una iniciativa plantea sustituir equipos obsoletos y contaminantes por sistemas modernos. Hoy es el Día de la Preservación de la Capa de Ozono.
Ecuador da un paso importante hacia la descarbonización, con el lanzamiento de una iniciativa que busca transformar el sector de refrigeración, aire acondicionado y bombas de calor (RAC).
El sector RAC (doméstico, industrial, comercial) es uno de los mayores consumidores de energía y emisores de gases contaminantes del país.
La propuesta, impulsada por el Ministerio de Producción, la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), busca acelerar la transición hacia tecnologías más eficientes y sostenibles.
“El sector refrigerante es fundamental para la economía y la vida diaria en Ecuador”, comentó el ministro de Producción, Luis Alberto Jaramillo, al destacar la urgencia de avanzar hacia soluciones con menor impacto ambiental.
La iniciativa propone avanzar hacia la sustitución de equipos obsoletos y altamente contaminantes por sistemas modernos, que reduzcan el consumo energético y las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
"Esto no solo beneficiaría al medio ambiente, sino que generará importantes ahorros para las empresas y mejorará su competitividad". Luis A. Jaramillo
La propuesta forma parte del Programa Ecuador Carbono Cero (PECC) y está alineada con los compromisos internacionales del país, como la Enmienda de Kigali al Protocolo de Montreal y las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC).

Sectores involucrados
La iniciativa de descarbonización del sector RAC comprende seis ámbitos: políticas y regulaciones, gestión de residuos y circularidad, cooperación y financiamiento, tecnología e innovación, capacitación, y certificación.
Sectores como el turismo, floricultura, acuacultura, industria alimentaria, supermercados y transporte están entre los principales beneficiarios del programa.
El turismo, por ejemplo, contribuye significativamente a la generación de gases efecto invernadero (GEI).
Las investigaciones de ONU Medio Ambiente indican que el consumo de recursos clave del sector turístico (energía, agua, suelo y materiales) está creciendo de forma proporcional.
En un escenario sin cambios, el turismo generaría hasta 2050, un aumento del 154% en el consumo de energía, del 131% en las emisiones de GEI, del 152% en el consumo de agua y del 251% en la disposición de residuos sólidos.
En este contexto y para ir hacia una modernización tecnológica, la Cámara Provincial de Turismo (Captur) ha propuesto a CAF -Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe- crear una hoja de ruta conjunta hacia la descarbonización progresiva del sector, para reducir la huella de carbono.

Impacto ambiental en Ecuador
De acuerdo con datos del Ministerio de Ambiente y Energía, las emisiones de hidrofluorocarbonos (HFC), gases usados principalmente en sistemas de refrigeración y aire acondicionado, comenzaron a registrarse en el Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero (INGEI) en 2010.
Desde entonces, las kilotoneladas de estas emisiones han aumentado casi nueve veces, siendo 2022 el último año con datos disponibles (ver gráfico).
Este rápido crecimiento muestra cómo el uso generalizado de productos que reemplazaron a las sustancias que dañaban la capa de ozono —como los refrigerantes antiguos— ha traído consigo un nuevo problema ambiental: el aumento de gases con un fuerte impacto climático, como los HFC.
"Los HFC tienen un alto potencial de calentamiento global y su consumo se está incrementando a una tasa de 10 a 15% anual". Onudi
El CO₂-eq (dióxido de carbono equivalente) es una medida estándar que se utiliza para comparar las emisiones de diferentes gases de efecto invernadero (GEI), en función de su potencial de calentamiento global (GWP).
Día de la Capa de Ozono
Hace 40 años, las naciones se reunieron en el marco del Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono.
Allí acordaron adoptar medidas para proteger a las personas y al planeta de la radiación ultravioleta nociva, que atraviesa una capa de ozono que podría estar dañada.
Y lo lograron. Sobre la base adicional de información científica, se adoptó el Protocolo de Montreal y se comenzó a eliminar gradualmente los clorofluorocarbonos —sustancias químicas artificiales utilizadas en la refrigeración, los aerosoles y la producción de espuma—, con lo que se puso en marcha la recuperación de la capa de ozono.
Como todos los años, en el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono (16 de septiembre), se celebra este logro histórico y proyecta hacia adelante otros 40 años de acción, señala la ONU en un comunicado.
“El Protocolo de Montreal y el Convenio de Viena siguen siendo cruciales para supervisar los niveles de ozono y radiación ultravioleta, así como las sustancias que agotan la capa de ozono y otras sustancias químicas, como los hidrofluorocarbonos (HFC), que se están eliminando gradualmente en virtud de la Enmienda de Kigali”.
En 2016, en la ciudad de Kigali, en Ruanda, todos los países del mundo adoptaron la Enmienda de Kigali, para reducir los HFC a través del Protocolo de Montreal.