'Energía nuclear, una vía para el desarrollo tecnológico del país'

Roque Santos, jefe de Ciencias Nucleares de la Politécnica Nacional, analiza los alcances y desafíos de esta fuente de energía

'Energía nuclear, una vía para el desarrollo tecnológico del país'
El Dr. Roque Santos es Jefe del Departamento de Ciencias Nucleares de la Escuela Politécnica Nacional (EPN). Foto: Youtopía Ecuador

Han transcurrido más de dos meses desde que el Gobierno difundió la Hoja de Ruta para el desarrollo de la energía nuclear en Ecuador, y el análisis del tema se intensifica. La presentación se realizó el 20 de febrero de 2025.

En este contexto, Youtopía Ecuador conversó con el Dr. Roque Santos Torres, jefe del Departamento de Ciencias Nucleares de la Escuela Politécnica Nacional (EPN), para profundizar en los alcances y desafíos de esta iniciativa.

¿De qué se trata la energía nuclear?

Es la energía obtenida a partir de la división de átomos. En las máquinas donde se produce la energía, se produce primero una división de átomos muy pesados. Estos átomos, cuando se dividen, liberan el calor y este calor se utiliza para calentar agua que forma vapor y ese vapor es el que mueve las turbinas de esas máquinas.

Muchos asocian la energía nuclear con las bombas atómicas.

Esto es importante decirlo porque uno de los miedos que se asocia con la energía nuclear es el uso en bombas nucleares. Reactores nucleares y bombas nucleares son dos cosas totalmente distintas.

Un reactor nuclear, en ningún escenario, en el peor accidente que se imaginen, no puede tener una explosión nuclear, como la de una bomba atómica. Es físicamente imposible, por la forma en la que está diseñado el reactor.

¿Hay que tener claro que una cosa son las bombas atómicas y otra los reactores nucleares?

Eso es bien importante porque es una distinción necesaria. A veces uno escucha energía nuclear y lo primero que le viene a la mente es la bomba atómica porque el primer contacto que tiene el ser humano con la energía nuclear es la bomba atómica. Entonces, eso queda tan grabado en la memoria colectiva, que siempre se asocia lo uno con lo otro, aunque no son lo mismo.

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Hecha la aclaración, ¿cuáles son las perspectivas de la energía nuclear?

En este momento existen reactores nucleares en varios países de mundo. El país que tiene más reactores es Estados Unidos., pero la cantidad de energía que produce no es ni el 10% de la energía que consume.

Después viene Francia, que tiene gran cantidad de reactores y ellos sí dependen en gran medida de la producción de energía de esos reactores, el 70%. Y en Francia no han tenido un accidente importante, que quede en la memoria colectiva.

¿Qué pasa en Latinoamérica?

En Latinoamérica tenemos el ejemplo más visible e importante en Argentina. Allá tienen, si no me equivoco, tres reactores nucleares.

Además, han podido desarrollar tecnología propia, que puede ser instalada en otros países. Se trata del reactor Carem, en el segmento de los reactores modulares pequeños (SMR, por sus siglas en inglés).

¿EE.UU., Francia, Argentina, reflejan la importancia de la energía nuclear?

Tenemos el caso de Francia que demuestra que la energía nuclear es una solución. Argentina en cambio nos demuestra que la energía nuclear es viable en los países latinoamericanos. Entonces, tanto en Argentina, Francia, EE.UU., China, Rusia, los reactores que están en operación, proveen energía y estos son los llamados reactores de tercera generación y alguno que otro de cuarta generación.

¿Qué implica tercera generación de un reactor nuclear?

Los reactores de tercera generación son equipos grandes y con mejor tecnología; producen una gran cantidad de energía. Una sola unidad podría producir 1.000 megavatios eléctricos y tienen un diseño más o menos parecido entre todos.

En estos reactores, cuando se piensa en el diseño, siempre se debe tomar en cuenta el estudio de sismicidad, las posibilidades que el reactor se quede sin electricidad y que siempre esté refrigerado. ¿Cuál es la concepción que se maneja ahora? Que el reactor pueda refrigerarse por sí solo y no libere material radiactivo.

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¿Cuál es el costo referencial de un reactor SMR de tercera generación?

Todo tiene que ver con la generación de la que estemos hablando, si son pequeños o grandes. En estos reactores de tercera generación los costos son bastante altos.

Un reactor nuevo está pensado para que cueste entre siete mil u ocho mil millones de dólares, pero siempre terminan costando un poco más, por asuntos de logística y otros gastos que implica su puesta en marcha.

¿Cómo se diferencia un reactor pequeño de un grande?

Por la cantidad de megavatios que produce. Los pequeños y medianos llegan hasta los 300 megavatios; hay reactores de 10, 20, 100, 150 y hasta 300 megavatios. Mientras que un reactor grande produce 1.000 megavatios eléctricos.

¿Cuánto tiempo llevan construir un reactor?

Entre 5 a 7 años más o menos, pero esto es la experiencia que se tiene hasta ahora. Si puede ser que, por ejemplo, en Ecuador, en las conversaciones con proveedores, uno de ellos tenga muy clara la película y se demore un poco menos.

Pero tampoco es una diferencia muy grande porque tienen que hacer la parte de la ingeniería civil, de estudios, y todo eso si se demora.

¿Ecuador está preparado para ir a la energía nuclear?

No es una pregunta de estar preparados o no, porque si uno considera que para poder incursionar en una tecnología se tiene que poner de antemano a los profesionales, a los expertos, nunca se estaría preparado para ningún tipo de tecnología porque siempre esta irrumpe de forma disruptiva.

Pensemos en la inteligencia artificial. Cuántas personas estaban preparadas para trabajar hace dos o tres años cuando apareció este tema; y apareció, y nos estamos adaptando. Más o menos pasa lo mismo con la energía nuclear.

Entonces, más que un camino de preparación en el tema, en educación, en la formación de competencias, es tomar una decisión.

¿Se pueden advertir limitaciones para que Ecuador incursione en esta energía?

Si el país toma la decisión, de ahí en adelante vamos a prepararnos, a desarrollar los conocimientos, las experticias, la formación, el marco regulatorio y todo lo demás, y se puede trabajar. No hay restricción para decir que Ecuador no debería pensar en ingresar en esto porque no es así.

Incluso el tema de los sismos, si uno piensa en los reactores antiguos de segunda generación, los sismos eran una cosa primordial limitante. Pero los diseños nuevos toman en cuenta estas posibilidades de sismología, de eventos catastróficos, que se puedan presentar y que el propio diseño pueda ser seguro.

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¿Qué se debe hacer para implementar la energía nuclear?

Lo que tengo que hacer es buscar una tecnología adecuada y hacer el Estudio de emplazamiento (NDLR. Es un estudio riguroso y multidisciplinario que evalúa la adecuación de un sitio específico para la construcción y operación segura de una planta nuclear).

Hay que buscar una zona que tenga la menor cantidad de sismos, de aguas freáticas, que tenga una zona alejada de la población, entre otras particularidades.

¿La Politécnica Nacional ha realizado algún estudio?

Ninguna universidad del país ha hecho un Estudio de emplazamiento. Pueden haber hecho análisis teóricos, estimaciones, planteamientos de hipótesis y alguna otra investigación adicional.

Pero un Estudio de emplazamiento es un estudio específicamente orientado a la implementación de una central nuclear y como en Ecuador nunca ha habido un interés real hasta ahora, ese estudio nunca se ha hecho. Para las centrales antiguas demora entre 1 o 2 años. Para una nueva habría que establecer esa línea de tiempo.

"Si no entramos en la energía nuclear, tampoco va a ser el fin del Ecuador; pero sí nos vamos a perder de un desarrollo tecnológico importante".

¿Por qué debe interesar al país esta fuente de energía?

Si no entramos nunca en la energía nuclear, tampoco va a ser el fin del Ecuador. Pero sí nos vamos a perder de un desarrollo tecnológico importante. Usted puede establecer una relación entre el desarrollo tecnológico y la presencia o no de energía nuclear.

Pensemos en Argentina, con un desarrollo tecnológico importante. A nosotros nos debería interesar para formar técnicos en esta área, que puede abrirnos camino a nuevas tecnologías y no dejarnos atrás en esta corriente que existe en el mundo.

¿Cuál es su conclusión sobre el interés gubernamental de implementar la energía nuclear en Ecuador? Incluso ya presentó una Hoja de Ruta.

El país necesita conversar más sobre este tema y se tiene que tomar una decisión consensuada, para que la energía nuclear sea una política pública de largo plazo.

Es decir, ¿vamos a entrar en la energía nuclear? Si la respuesta es Sí; vamos adelante. Si la respuesta es No, tal vez lo conversamos y lo discutimos; y tal vez en un futuro lo vamos a volver a conversar, pero ya no va a ser tan ajeno.

Lo que no puede pasar es no conversar o decir directamente No, porque somos sísmicos; o No, porque no tenemos la capacidad o porque no estamos formados. Esa Hoja de Ruta es la que debe llevarnos a tomar una decisión como país.

El Dr. Roque Antonio Santos Torres tiene un Doctorado en Ingeniería Nuclear por la Universidad de Tennessee (EE.UU.) y una Maestría en Ingeniería Nuclear y Aplicaciones por la Universidad Autónoma de Madrid, España. Actualmente es Jefe del Departamento de Ciencias Nucleares de la Escuela Politécnica Nacional (EPN) y trabaja en esa Casa de Estudios desde hace 12 años. Su campo de investigación es la simulación y detección de radiaciones ionizantes y las aplicaciones de las radiaciones ionizantes en la industria. El Dr. Santos ha sido Oficial de Seguridad Radiológica de la Fuente de Cobalto-60 de la EPN, que es la instalación radiactiva más grande del país.