12 nuevas especies de flores fueron descubiertas en el Chocó Andino

12 nuevas especies de flores fueron descubiertas en el Chocó Andino

Por Cristina Márquez

Un equipo de científicos de la Fundación Aves y Conservación y del Instituto Federal Suizo para la Investigación de Bosque, Nieve y Paisajes (WSL) descubrió 12 nuevas especies de flores en el noroccidente de Pichincha, en la zona del Chocó Andino.

Algunas plantas aparecen descritas en artículos científicos publicados en revistas indexadas y las descripciones de otras especies están en vías de publicación.

La investigación, liderada por Katherine Graham del WSL, se llevó a cabo entre el 2017 y el 2020 y contó con el apoyo de investigadores locales.

Los expertos estudiaron la interacción de las aves con las plantas en los diferentes pisos climáticos. La dieta de los colibríes fue el objetivo inicial de la investigación con miras a conservar las plantas de las que se alimentan.

Al analizar las plantas, Francisco Tobar, el botánico del grupo, notó que algunas de ellas no constaban en ningún registro.

“Fue una experiencia muy emocionante participar en el estudio y encontrar flores que no conocíamos. Este hallazgo nos ayuda a valorar y conservar estos sitios megadiversos que tiene el país”, dijo Francisco Tobar.

En el estudio se tomaron muestras en 10 sitios del Chochó Andino. Este ecosistema, que en total tiene unas 287.000 hectáreas, tiene remanentes de bosques andinos, páramos y ecosistemas arbustivos.

Representa el 30.31% del territorio Pichincha y abarca zonas de Quito, Pedro Vicente Maldonado y San Miguel de los Bancos.  

Las nuevas especies son muy raras y están en pequeños espacios

De las 12 nuevas especies de flores descubiertas en el Chocó Andino, la columnea fluidifolia fue hallada en la reserva Mashpi, situada a 60 kilómetros de Quito.

La planta tiene hojas lancioladas de punta estrecha y afilada, pequeñas flores rojas que crecen en hileras y pertenece a la familia gesneriácea.

Durante casi dos años Francisco Tobar buscó en registros de otros países del mundo con zonas geográficas similares a la reserva Mashpi, pero no encontró ninguna planta parecida. Se trataba de una nueva especie endémica de esa zona.

En la misma reserva fue encontrada la columnea floribunda, una planta que se caracteriza por tener múltiples brotes florales amarillos con franjas naranjas.

Al igual que la fluidifolia, sólo ha sido encontrada en el bosque lluvioso de Mashpi, pero se espera que haya poblaciones adicionales en Imbabura y Esmeraldas.

Los nuevos hallazgos están en peligro crítico de extinción

Las flores están en riesgo de extinción, por su delicadeza.

“Estamos muy emocionados por este nuevo registro botánico que es una demostración de la biodiversidad del Ecuador y de lo mucho que nos falta por investigar el Chocó Andino, y al mismo tiempo nos preocupa que estas especies están en riesgo de extinción“, dijo Mateo Roldán, director de investigación de Mashpi Lodge, un emprendimiento turístico que busca proteger la reserva de 2.900 hectáreas.

Los investigadores solo han podido encontrar 40 ejemplares de la columnea fluidifolia en el área protegida y hasta el momento la planta no ha sido encontrada en otras zonas del país, lo que la coloca en peligro crítico de extinción.

La fluidifolia ahora es parte de las más de 18 500 especies de plantas vasculares registradas en el Ecuador y de las 500 especies identificadas en la reserva Mashpi.

La diferente frente a otras Columnea está en la inusual disposición de sus hojas; en un mismo brote se encuentran pares de hojas anisófilas (de distinto tamaño) y pares isófilos (del mismo tamaño).

Como parte del estudio se descubrieron cinco especies nuevas de columneas, que se caracterizan por sus flores epífitas, pendulares, coloridas y llamativas, razón por la cual son las preferidas de los colibríes.

Una de ellas está en estado vulnerable de extinción y las demás en riesgo crítico.

También se encontraron tres especies de orquídeas y otras cuatro especies de plantas que aún están en vías de publicación.

“Estas nuevas flores están restringidas a espacios pequeños que, si llegaran a ser intervenidos, implicaría la extinción la especie”, dice Tobar.