Militares apoyarán vigilancia en áreas protegidas tras incursión de bandas criminales
Las áreas protegidas de Ecuador están en peligro por actividades criminales como la minería, la tala y la pesca ilegales.
El Ministerio de Ambiente anunció que está implementando acciones con los ministerios de Defensa y del Interior "para fortalecer el acompañamiento de personal militar y naval en las áreas protegidas" de Ecuador.
La decisión se debe a que la seguridad varias áreas protegidas ha empeorado en el primer semestre de 2024 por la acción de grupos criminales.
Ante las amenazas de delicuencia organizada y de delincuencia común, la Asociación de Guardaparques solicitó presencia militar en por lo menos 10 de las 50 Áreas Naturales Protegidas.
Según un documento oficial al que este medio tuvo acceso, grupos del crimen organizado y la delincuencia común han incursionado en áreas naturales protegidas de la Costa y la Amazonía.
El Ministerio reconoce que existen actividades de minería y tala ilegal de bosques, tráfico de flora y fauna e invasiones de tierras, impulsadas por las bandas criminales.
Grupos del crimen organizado y la delincuencia común están incursionando en las áreas protegidas.
Esta situación pone en serio riesgo no solo el patrimonio natural del país sino también la vida de los 620 guardaparques que se hallan distribuidos en medio centenar de áreas.
Los guardaparques ya han sufrido amenazas de secuestro, robos y violencia, que se han incrementado en el primer semestre de 2024, por lo que solicitaron presencia militar en los sitios más afectados.
La Asociación de Guardaparques del Ecuador expuso estos problemas, en un oficio dirigido a la ministra del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, Sade Rashel Fritschi, el 12 de julio de 2024.
Lo que se necesita ahora “es dar soporte al personal en territorio en las acciones que se ejecutan, donde también conste el acompañamiento permanente de personal militar en las guardianías de cualquier área protegida, en especial en las de mayor peligrosidad”, dijo a este medio una fuente que ha pedido reserva.
Las áreas críticas
De acuerdo con la información obtenida por Youtopía, la crisis abarca a por lo menos una decena de áreas protegidas.
La mayor parte de estas áreas está en el perfil costero, que las bandas criminales utilizan como ruta de tráfico de estupefacientes hacia el exterior.
En esta categoría entran también las áreas marino costeras de las provincias de Manabí y de Esmeraldas.
Los grupos criminales incursionan además en las áreas de la Amazonía norte, cerca de la frontera con Colombia, en las provincias de Napo, Orellana y Sucumbíos. En algunos casos se trata de grupos armados colombianos.
Y en la Amazonía sur, las zonas críticas están en las provincias de Zamora Chinchipe y Morona Santiago.
Otros sitios en donde también se han registrado incidentes son las que se encuentran en la provincia de El Oro, así como en el Parque Nacional Cotopaxi y de las reservas y refugios en la provincia de Guayas.
Mapa de Áreas Protegidas de Ecuador
Parques que necesitan seguridad
Las áreas protegidas en donde se reportan actividades ilegales son:
-Parque Nacional Machalilla (Manabí).
-Refugio de Vida Silvestre Pacoche (Manabí).
-Reserva Ecológica Cayapas Manglares Mataje (Esmeraldas).
-Refugio de Vida Silvestre Manglar del Estuario del Río Esmeraldas (Esmeraldas).
-El Refugio de Vida Silvestre Manglar del Estuario del Río Muisne (Esmeraldas).
-La Reserva Ecológica Arenillas (El Oro).
-Parque Nacional Cotopaxi (Cotopaxi).
-Reservas y refugios en la provincia de Guayas.
-Reservas en la Amazonía Norte en Napo, Orellana y Sucumbíos, así como en el sur, en las provincias de Zamora Chinchipe y Morona Santiago.
Las medidas anunciadas
Frente a este nuevo escenario, los guardaparques pidieron capacitación en seguridad, defensa personal, manejo de conflictos, supervivencia y primeros auxilios.
El Ministerio acogió este pedido pero no la petición de dotar al personal, técnico y administrativo de los parques naturales con un kit básico de armas disuasivas no letales.
A cambio anunció la adquisión de más vehículos para patrullar las áreas marino costeras, así como de drones y equipos de GPS para fortalecer la vigilancia.