El manglar protegido superó las 100.000 hectáreas en Ecuador
Cuatro asociaciones de El Oro se sumaron al manejo sostenible y la custodia de manglares. La entrega se hizo por el Día de Conservación de este ecosistema.

Las asociaciones de Recolectores de Productos Bioacuáticos "Ni Un Paso Atrás" (24 miembros), de Producción Pesquera Artesanal y Afines "San Antonio" (46), de Mujeres Artesanas "Estero Porteño" (38) y de Mariscadores Autónomos "19 de Octubre" (58) se unieron al proyecto sostenible de los manglares.
Ahora son más de 100.000 las hectáreas de manglar protegidas, bajo la figura de Acuerdos de Uso Sostenible y Custodia del Ecosistema de Manglar (Auscem). Se trata de una acción del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (Maate) y Conservación Internacional-Ecuador, financiada por el Fondo Verde para el Clima (GCF).
Según la normativa nacional, los manglares en Ecuador son propiedad del Estado. Los Auscem están vigentes desde el 2000 y entregan a los beneficiarios derechos de uso y responsabilidad de protección.
A propósito del Día Internacional de Conservación del Ecosistema de Manglares, se hizo la entrega simbólica para que los comuneros se hagan cargo de varias tareas.
Evitar la tala del manglar, reforestar, vigilar la pesca ilegal y utilizarlo en actividades sostenibles son las principales acciones a las que se comprometen las asociaciones beneficiarias.
La importancia del manglar
Este ecosistema es fundamental para el equilibrio ambiental. Contiene especies únicas, muchas de ellas en peligro de extinción. Es fuente de sustento para miles de familias que dependen de sus recursos.
Al mismo tiempo, los manglares purifican el aire y mitigan los impactos del cambio climático como inundaciones, tormentas, olas de calor y tsunamis.
Desde el inicio se ha pretendido evitar la sobreexplotación del recurso y en 25 años la figura de los Auscem ha demostrado ser una herramienta eficaz para proteger este valioso ecosistema.
Estudios recogidos por CI demuestran que las áreas de manglar custodiadas tienen una tasa más baja de deforestación, en una relación de 2,46% contra 18,6%).
De igual manera, las áreas bajo esta figura de conservación tienen una tasa de recuperación de manglares del 9%.
En Ecuador se han registrado 7 especies de manglar, que pertenecen a 4 familias diferentes. La flora y fauna asociadas comprenden más de 100 especies.
A pesar de su importancia, en el país se ha perdido ya el 25% del manglar por la conversión de tierras intermareales en acuacultura de camarón, lo que ha aumentado la emisión de gases de efecto invernadero (GEI).
Los manglares ocupan el 36% de la costa ecuatoriana, y el 96% de este ecosistema está ubicado en 8 municipios costeros, donde habitan más de 3,4 millones de personas (muchas de ellas con altos niveles de pobreza).
La producción sostenible, a la que se comprometieron las comunidades, significa obtener mariscos y crustáceos, como cangrejos, conchas, ostras, y una gran variedad de peces.
Además, son una fuente de generación de actividades económicas mediante el turismo, actividades recreacionales, la identidad cultural y los saberes ancestrales.
La directora del proyecto Manglares para el Clima, María Fernanda Cortez, recordó que los manglares mejoran la calidad del aire y del agua, previenen la erosión costera, secuestran y almacenan el carbono del aire, y mitigan eventos climáticos extremos.
“Se estima que los manglares evitan aproximadamente 250 millones de dólares en pérdidas de propiedades por inundaciones cada año”: María Fernanda Cortez
Objetivos de mediano plazo
La meta planteada por el trabajo cooperativo del sector público, las asociaciones comunitarias y la cooperación internacional es reducir la vulnerabilidad de las comunidades costeras a los impactos del cambio climático, a través de la gestión sostenible y la restauración de los manglares.
Se han propuesto, para los próximos seis años, aumentar la protección y la gestión efectiva de 150.000 hectáreas de manglar, restaurar 4.850 hectáreas del ecosistema y reducir el riesgo de inundaciones para 89.600 personas.
Y, por otro lado, se busca incrementar la adopción de prácticas sostenibles de producción de camarón y estándares acuícolas reconocidos nacional e internacionalmente en 20.000 hectáreas.