Ecuador y el EUDR: avances y desafíos con el nuevo plazo de la UE
La ampliación del plazo da más tiempo para afinar sistemas de trazabilidad y diligencia debida. Los retos para pequeños productores persisten.
Ecuador continúa trabajando en su preparación para cumplir con el Reglamento Europeo contra la Deforestación Importada (EUDR).
Esto, en un contexto en el que la Unión Europea (UE) decidió aplazar un año más su entrada en vigor, ahora prevista para el 30 de diciembre de 2026. En principio se contemplaba implementar este año: desde el 30 de diciembre de 2025.
La prórroga concede un margen adicional de adaptación tanto a los países proveedores como a las empresas europeas, aunque se mantienen las exigencias de trazabilidad y legalidad de las materias primas.

Ajustes en la UE y debate político interno
La decisión del Parlamento Europeo —respaldada por 402 votos a favor, 250 en contra y 8 abstenciones— refleja las divisiones internas en torno al EUDR.
Los grupos del Partido Popular Europeo y de extrema derecha apoyaron el aplazamiento, mientras representantes verdes y socialdemócratas criticaron que esta medida debilita las metas ambientales del bloque.
La Comisión Europea, que ya había planteado una prórroga en 2024 por la falta de preparación de las empresas, advirtió que la reciente simplificación del reglamento podría distorsionar su objetivo inicial.
El Consejo de la UE también respaldó el ajuste del calendario, extendiendo la exención para las pymes hasta el 30 de junio de 2027 y dejando abierta una revisión para abril de 2026.

¿Qué exige el EUDR?
El reglamento prohíbe la comercialización en la UE de productos vinculados a deforestación, ocurrida después del 31 de diciembre de 2020.
Además, exige demostrar legalidad y trazabilidad completa en siete materias primas: cacao, café, palma, madera, caucho, soya y ganado bovino.
Para exportar, los operadores deberán presentar una Declaración de Diligencia Debida basada en tres pasos: recopilación de información, evaluación de riesgo y mitigación cuando sea necesario.
La geolocalización de parcelas, las fechas de producción y la evidencia de ausencia de deforestación son requisitos centrales.

Desafíos para la cadena productiva
Aunque en Ecuador se ha avanzado en la construcción de herramientas y lineamientos, persisten retos importantes, especialmente para pequeños y medianos productores que afrontan barreras tecnológicas y de conectividad.
Xavier Rosero, presidente de Fedexpor (Federación Ecuatoriana de Exportadores), señala que el país posee condiciones para demostrar cumplimiento, pero advierte que la transición digital sigue siendo una brecha estructural.
“El reto está en los procedimientos y la tecnología, especialmente para los pequeños y medianos productores que no pueden incorporarla sin mecanismos de apoyo”, afirma.
El sector formal ya cuenta con certificaciones homologadas en Europa, pero la heterogeneidad en niveles de digitalización, formalidad y georreferenciación exige esfuerzos adicionales de integración.
Búsqueda de mayor flexibilidad
Ecuador y otros países proveedores han solicitado a la UE más claridad en los plazos y metodologías de implementación del EUDR.
Aunque el reglamento entrará en vigor en 2026, se baraja la posibilidad de un periodo piloto para realizar ajustes sin afectar el flujo comercial.
Según Rosero, el sector se prepara bajo el supuesto de que no habrá cambios sustanciales, pero reconoce que un periodo más flexible facilitaría la incorporación de pequeños y medianos productores.
Entre 1990 y 2020 se destruyó globalmente una superficie forestal mayor que la de la UE, y cerca del 10% es atribuible al consumo europeo.
Capacitación y apoyo técnico en marcha
El Proyecto SAFE, ejecutado por la Cooperación Alemana GIZ con apoyo de la UE, ha fortalecido la capacidad de respuesta del país, especialmente en la Amazonía.
Entre sus acciones destacan capacitaciones, guías participativas, módulos de trazabilidad digital, programas de Formador de Formadores y simulacros de compraventa para probar sistemas de diligencia debida.
Además, trabaja con el Ministerio de Agricultura (Magap), Anecacao y el Centro de Transformación Digital de GIZ, en un curso virtual autoguiado y un chatbot para resolver dudas técnicas.
Insumos como la Caja de Herramientas de Debida Diligencia y la Evaluación Nacional de Riesgos del Cacao se han convertido en referencia para operadores y organizaciones.

Agenda pendiente para el sector
Con el nuevo plazo europeo, la prioridad es consolidar la georreferenciación, estandarizar procesos, fortalecer la conectividad rural y asegurar la operatividad homogénea de los sistemas de diligencia debida.
El desafío central es integrar a los pequeños productores y garantizar trazabilidad verificable en toda la cadena productiva, en un contexto en el que las exigencias ambientales ganan peso en los mercados internacionales.


