Mayor acceso al agua trae menos conflictos y más sostenibilidad
La Semana Mundial del Agua se conmemora este 2024 en medio de alertas y en busca de un enfoque global
'Superar fronteras: agua para un futuro pacífico y sostenible' es el lema de los eventos que organiza el Instituto Internacional del Agua de Estocolmo en la capital sueca en 2024.
El deseo de un futuro pacífico responde a la constatación de que alrededor del agua hay cada vez más conflictos, especialmente cuando escasea, está contaminada o hay dificultades para acceder a ella.
Según Pacific Institute, entre 2020 y 2023 se reportaron 543 conflictos en los que el agua fue la causa o el objetivo de la violencia o se usó como arma, una cifra mayor que las de años pasados.
A propósito del Día Mundial del Agua, Naciones Unidas hizo notar que la falta de agua puede aumentar las tensiones entre comunidades y hasta países.
Y se apoyó en los datos: más de 3.000 millones de personas dependen del agua que atraviesa las fronteras nacionales, pero sólo 24 países tienen acuerdos para compartirla.
En el foro de Estocolmo, esta semana se reúnen expertos para proponer soluciones a los desafíos hídricos más acuciantes del planeta, entre ellos la disponibilidad de agua.
Pese a que el agua es vital para la sobrevivencia humana y está disponible a escala global, el Instituto estima que 4 de cada 10 personas sufren algún tipo de escasez de agua.
Los desafíos en Ecuador
Naciones Unidas y la Organización Panamericana de la Salud enfatizan que el 70% de la población ecuatoriana tiene agua segura pero el 30% no, y se expone a consumir agua contaminada con heces.
Además, seis de cada 10 niñas y niños en zonas rurales no acceden a agua segura y saneamiento. El 25% de hogares ecuatorianos en zonas rurales no cuenta con agua potable.
En efecto, la Encuesta Nacional sobre Desnutrición Infantil (ENDI), realizada en septiembre de 2023, arrojó estas y otras cifras sobre la calidad del agua y su incidencia en la nutrición.
Otro hecho preocupante se desprende de un estudio científico según el cual en Ecuador hay una importante prevalencia de enfermedades relacionadas con la calidad del agua.
La conclusión es que las poblaciones más afectadas por este problema de salud pública son las indígenas, lo cual incide en una menor expectativa de vida que la de otros grupos.
La región, lejos de los ODS
Si bien en la Región Andina hay avances, todavía existen limitaciones institucionales y desafíos que inciden en la ejecución de proyectos, recalca Naciones Unidas.
El índice de cumplimiento de Ecuador del sexto de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2030: Agua limpia y saneamiento es bajo y se muestra en rojo.
En América Latina y el Caribe, Naciones Unidas apoya a gobiernos y socios para implementar proyectos que fortalezcan las redes de distribución, acueductos y plantas de tratamiento.
Naciones Unidas plantea la gestión integral de los recursos hídricos, para reducir la brecha de infraestructura de agua y saneamiento y fortalecer a las entidades que prestan esos servicios.