Especímenes retenidos y decomiso de carne de oso, en Quito y Morona

Especímenes retenidos y decomiso de carne de oso, en Quito y Morona
Especímenes retenidos en operativo en Quito. Foto: cortesía Ministerio de Ambiente

Redacción Youtopía

Los delitos contra la fauna silvestre son recurrentes en el Ecuador. Eso se evidencia tras el desarrollo de operativos durante la última semana en los cantones de Quito y Morona.

El 24 de octubre, en el sur de Quito, se efectuó una acción de este tipo y se retuvo 228 especímenes de vida silvestre exóticos y 16 nativos.

Además, se ubicó un elemento constitutivo (piel de venado de cola blanca) y una serpiente preservada en alcohol.

Estos individuos de vida silvestre presentaban buen estado, de acuerdo con el diagnóstico preliminar del medio de conservación y manejo ex situ al que fueron entregados.

En este operativo, tres personas fueron trasladadas a la Unidad de Flagrancia.

Delegados del Ministerio de Ambiente (Maate), de la Fiscalía (FGE) y de las unidades especializadas de la Policía Nacional, participaron en este operativo.

Especímenes retenidos en operativo en Quito
Una muestra de cómo se encontraron los animales, durante el operativo efectuado en el sur de Quito, el 24 de octubre de 2023. Foto: Ministerio de Ambiente

Carne de oso de anteojos y elementos constitutivos, en Morona

En otro operativo realizado en el sector de Santa Ana (parroquia Sevilla Don Bosco, cantón Morona), se retuvieron 45 libras de carne de oso de anteojos.

La cabeza y las patas del oso estaban exhibidos para la venta, en una vivienda. El oso de anteojos se encuentra en peligro de extinción, según el Libro Rojo de Mamíferos del Ecuador.

Durante este operativo, se retuvo el producto y los elementos constitutivos del espécimen.

El Maate instó a la ciudadanía a reportar al ECU 911 este tipo de hechos, ya que el tráfico y tenencia ilegal de animales silvestres constituye un delito.

El Código Integral Penal (Art. 247), señala que quienes cometan delitos contra la flora y fauna silvestres pueden ser sancionados con pena privativa de libertad, de uno a tres años.