Así funciona la Mesa de Finanzas Sostenibles en Ecuador
29 entidades del sector público, privado y de cooperación participan de la Mesa. El país necesita USD 15.450 millones hasta 2030, para cumplir sus metas climáticas.
Ecuador busca transformar su sistema financiero en un motor de desarrollo sostenible, inclusivo y resiliente, a través de la Mesa de Finanzas Sostenibles (MFS).
Este espacio reúne a más de 29 instituciones del sector público, privado y cooperación internacional, con el objetivo de canalizar inversiones hacia proyectos que generen impacto social y ambiental positivo.
La iniciativa se enmarca en la Agenda de Crecimiento 2040 y en los compromisos climáticos del país, con metas concretas para 2025: movilizar al menos 300 millones de dólares.
Además, capacitar a más de 400 actores del ecosistema financiero y fortalecer el marco regulatorio con criterios ambientales, sociales y de gobernanza.

Finanzas sostenibles y desarrollo inclusivo
El objetivo central de la agenda es que el sistema financiero sea un instrumento para impulsar crecimiento económico, proteger el medio ambiente y promover bienestar social.
Para lograrlo, la MFS conecta las inversiones públicas y privadas con proyectos que generan empleo, innovación y menor impacto ambiental.
Según el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), esta estrategia no solo responde al Plan Nacional de Desarrollo 2025–2029, sino que se alinea con la Agenda de Crecimiento 2040.
También se incorpora la Estrategia Nacional de Financiamiento Climático (EFIC) y las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC), “garantizando que cada decisión financiera contribuya a un Ecuador sostenible y resiliente frente a los desafíos globales del cambio climático”, señala el MEF.

Respaldo internacional y cooperación global
La agenda cuenta con el respaldo del proyecto UK PACT, del Gobierno del Reino Unido, que promueve transiciones climáticas inclusivas y bajas en carbono, mediante asistencia técnica, fortalecimiento institucional e innovación en políticas públicas.
En Ecuador, el proyecto “Fortalecimiento del mecanismo de gobernanza de finanzas sostenibles”, implementado por el Instituto Global para el Crecimiento Verde (GGGI), fortalece la gobernanza de la MFS y la movilización de financiamiento sostenible.
Otras instituciones que se han sumado a la agenda de la MFS incluyen el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Banco Mundial – IFC, CAF, Agencia Francesa de Desarrollo (AFD), GIZ, PNUD, IICA. Además, se contempla la participación de embajadas de países como Reino Unido y Alemania.
Taxonomía verde, capacitación y gobernanza
Entre las acciones clave que Ecuador implementa con el apoyo de UK PACT y GGGI se encuentran:
· Fortalecimiento de la Mesa de Finanzas Sostenibles, plataforma que integra más de 29 instituciones públicas y privadas.
· Diseño de la taxonomía verde nacional, herramienta para identificar y clasificar inversiones sostenibles.
· Desarrollo de herramientas de evaluación de proyectos verdes y líneas de crédito sostenibles.
· Capacitación técnica en finanzas sostenibles y riesgo climático, con enfoque de género, discapacidad e inclusión social (GEDSI).
La taxonomía verde permitirá alinear inversiones con los objetivos climáticos del país, mejorar la transparencia y confianza del mercado, y facilitar la movilización de capital nacional e internacional. Se espera que la hoja de ruta se apruebe a finales de 2025 y que la herramienta esté operativa en 2027.
Para avanzar en el objetivo de construir esta herramienta técnica, que permitirá identificar actividades económicas ambientalmente sostenibles y orientar las inversiones públicas y privadas hacia proyectos verdes, se desarrolló una reunión de trabajo el 12 de noviembre de 2025.
Las cifras del financiamiento sostenible
Ecuador necesita USD 15.450 millones hasta 2030, para cumplir sus metas climáticas, distribuidos en 7.450 millones para mitigación y 8.000 millones para adaptación.
Desde 2019, el mercado de valores ecuatoriano ha canalizado USD 919 millones en bonos temáticos, de los cuales 345 millones corresponden a bonos verdes, 245 millones a bonos sociales con enfoque de género y 159 millones a bonos azules.
El MEF ha implementado canjes de deuda por naturaleza, combinando alivio de deuda externa con inversión en conservación ambiental:
· Galápagos (2023): USD 1.630 millones de deuda convertidos en USD 656 millones de nueva deuda, liberando USD 450 millones para la protección de ecosistemas en 198.000 km².
· Biocorredor Amazónico: USD 1.527 millones reestructurados en USD 1.000 millones, destinando USD 460 millones a conservación de la Amazonía.
“Estas herramientas posicionan a Ecuador como referente regional en soluciones financieras sostenibles”, señala el Ministerio de Economía y Finanzas.
Ecuador necesita USD 15.450 millones hasta 2030, para cumplir sus metas climáticas, distribuidos en 7.450 millones para mitigación y 8.000 millones para adaptación.

Sectores prioritarios para el financiamiento sostenible
Los recursos serán canalizados hacia sectores estratégicos:
· Energía limpia y eficiencia energética.
· Agricultura sostenible.
· Infraestructura resiliente y transporte bajo en carbono.
· Conservación de biodiversidad y bosques.
· Proyectos de bioeconomía y economía circular con criterios GEDSI.
El enfoque GEDSI asegura que los beneficios de las inversiones lleguen a grupos históricamente excluidos, integrando salvaguardas sociales, criterios de equidad, accesibilidad y participación.
Este enfoque se aplica en la evaluación de proyectos, formación técnica para instituciones financieras y en indicadores de transparencia y rendición de cuentas.

Atracción de inversiones y desafíos
La agenda sostenible impulsa nuevas inversiones, empleo de calidad y modernización productiva.
Para 2025, se espera movilizar USD 300 millones en instrumentos financieros, generando empleo en agricultura sostenible, infraestructura verde y vivienda eficiente.
A largo plazo, los 15.400 millones estimados hasta 2030 podrían consolidar un mercado financiero robusto y resiliente, atrayendo inversión extranjera directa con estándares claros de sostenibilidad.
Entre los desafíos identificados por Ecuador se encuentran:
· Mejorar la coordinación interinstitucional.
· Establecer criterios estandarizados para inversiones sostenibles (taxonomía verde).
· Fortalecer capacidades técnicas en finanzas sostenibles, riesgo climático y salvaguardas sociales.
Para acelerar la agenda, el país requiere consolidar liderazgo político, fortalecer capacidades técnicas, construir marcos regulatorios robustos y movilizar recursos financieros.
La agenda de finanzas sostenibles en Ecuador representa un paso decisivo hacia un modelo económico más inclusivo, resiliente y verde.



